La cumbia y otras crisis del arte.

Responder porque la cumbia se ha vuelto tan popular, revelaría también el porqué del éxito de los programas de tv vigentes. Esta crisis cultural, y no hablemos de incapacidad, hablemos de pereza mental. Me refiero a aquella masa que consume lo más simple de entender, lo más explícito y no solo en esta doctrina, en todas las disciplinas, también hablamos del humor, la mayoría de los chistes giran respecto a las partes más carnales. Y creame, estimado amigo, que la calidad musical no se basa con que una canción sea silbable y no me vengan con esa de que “y quien dice lo que está bien y lo que está mal y que el gusto es relativo” y si... el gusto si es relativo, de eso estamos hablando, pero la calidad no, existe una calidad de composición y también existe, bajo dos o 3 notas musicales, rimar un nombre propio, con algún tipo de connotación sexual.
Y usted quizá diga, “pero para que quiero ser más selectivo, si aquel hombre de doctrinas elementales es feliz”, sin embargo, usted sabe que hay varios niveles de felicidad y también reconoce las diferencias entre “pasatiempo, entretenerse” y “disfrutar” y cuanto más cultura se tenga, cuanto más usted conozca sobre algún tema, se abre el abanico de posibilidades y uno va adiestrando un paladar que se torna cada vez más exquisito, y sus placeres serán de un goce mucho más profundo que quien no posée esa preparación. También hay un mito de que la calidad de un músico es proporcional a la capacidad de velocidad en la ejecución de un determinado instrumento y no, de eso no se trata la estética, puede alguna vez ser un recurso, solo eso. No discutimos de música, hablamos de lo evidente frente a lo sutil, del porno con lo sensual. Y que si existe una calidad, pese a los gustos personales.